III: ¿Juego, juguete o juego de mesa?

¿Juego, juguete o juego de mesa?

Existe en el imaginario colectivo un batiburrillo de definiciones que confunde, en muchas ocasiones, los juegos con los juguetes, o estos últimos con los juegos de mesa. Antonio Catalán va a intentar entender esta diferenciación tan necesaria para el estudio del fenómeno sociológico de los juegos de mesa, aunque avisa: “Partimos de la base que dar una definición completa de juego, juguete y juego de mesa, en una pocas líneas es tan complicado como definir cultura en la misma proporción. La intención es solo acercarse al concepto básico, ya que iremos desgranando definiciones a lo largo del trabajo, que nos ampliaran las referencias. De cualquier modo, indicaremos básicamente que el estudio del juego entra en la historia cultural, el estudio del juguete entronca con la educación y el del juego de mesa con el estudio del diseño”.

¿Qué es un juego?

Aunque muchos autores han intentado definir el concepto de juego, el autor se inclina por la definición que Bruce Whitehill hizo en el paper “Toward a Classification of Non-Electronic Table Games” publicado en el libro “Proceedings of Board Game Studies Colloquium XI Lisbon, Portugal, en Abril 2008.: “Definimos juegos a todo pasatiempo que se juega de acuerdo a unas reglas específicas, tiene un final regulado en la que uno (o más jugadores) se declaran ganadores y que es jugado dentro de un área determinada”.

Prosigue Catalán desgranando las características que hacen al juego único y específico frente al juguete: “Un juego para que sea tal, ha de tener un propósito y un resultado, que simplemente puede ser el entretenimiento, sin más, lo que podemos entender como juego libre, que puede estar apoyado, o no, por herramientas para realizarlo, a la que podemos incluir otras características en el momento que lo convertimos en algo estructurado, que son las reglas, que lo convierten en un constructo, en una creación de la imaginación humana".

Que la imaginación humana sea el acicate para que se desarrolle un juego es una cosa extraordinaria, ya que “A partir de esa regla que gobierna la acción, que puede ser tan simple como saltar o pensar en algo, se añaden otras características que conforman el juego: número de jugadores, interacción y su rol, los requisitos del juego o habilidades para realizarlo, además de un lugar físico o marco mental donde desarrollarlo, lo que define Huizinga como círculo mágico”.

Sigue Antonio Catalán: “Como indicamos al principio, nos centramos en los juegos de mesa descartando, el estudio del deporte como juego ya que es una actividad física reglada, principalmente competitiva. Tampoco hablaremos del juego de azar, que incluye a todos aquellos juegos en que la suerte y las apuestas conlleven un beneficio o pérdida económica. Aunque etimológicamente se utiliza la palabra juego para definirlo, conceptual y éticamente son campos muy diferentes. El idioma inglés lo diferencia claramente con el término “gambling” para juegos de azar y las apuestas, utilizando “gaming” para el resto”.

Características de un juguete

¿Qué hace a una herramienta convertirse en juguete? ¿Cuáles son las características de un juguete? “Cualquier objeto se puede convertir en un juguete, un palo, unas piedras, o cualquier objeto cotidiano se puede convertir en una herramienta para jugar, para el disfrute lúdico, o para simular una actitud de juego. El juego es simulacro, realizar una acción placentera, y el juguete es su herramienta, dependiendo de la creatividad e imaginación de cada uno. Puede haber juego sin juguetes, pero no usar juguetes sin juego, sin actitud lúdica”.

Un objeto puede transformarse en un juguete cuando se utiliza con actitud lúdica. Aunque es cierto que han sido los adultos los que han creado juguetes con determinadas formas para que los niños puedan disfrutar: “El tiempo y los recursos disponibles crean la sofisticación en el juego y con ello el juguete. Al principio fueron creados de forma artesanal por el propio usuario, siendo suficiente, pero la llegada de la industrialización lo adapta como producto. La psicóloga Julia Iriarte indica que: el concepto de objeto fabricado expresamente para que jueguen los niños es necesariamente contemporáneo y exclusiva de la cultura occidental. La muñeca, el caballo de cartón o las piezas de construcción, son herramientas planteadas para ayudar al niño en esa actividad placentera, que centra su actividad y aprendizaje principalmente durante la infancia”.

Con la evolución de la sociedad hacia la mercadotecnia, la sociedad de consumo adaptó el concepto de juguete: “La revolución industrial y el consumismo lo convirtieron en un producto, creando toda una industria entorno a él. No necesariamente el valor y la calidad del juguete mejoran la experiencia de juego, el usuario es el que le da el valor según su criterio. El prescriptor de compra suele ser el niño y el adulto al adquirirlo se fija en otras calidades como lo material, la forma y la calidad educativa, algo totalmente subjetivo y publicitado en la actualidad”.

“Centrar el juguete solo en la infancia es un error del pensamiento colectivo, ya que los adolescentes y adultos los usan. La sociedad utiliza juguetes como herramientas lúdicas del juego, tanto en los deportes, como juegos de mesa, e incluso con connotaciones privadas, con los denominados juguetes sexuales”.

Los juegos de mesa modernos

Antonio Catalán esboza las características fundamentales de los juegos de mesa que, aunque algunas sean muy obvias, resaltan la diferenciación frente a otros juegos y juguetes: “Por definición un juego de mesa es todo aquel que necesita de una mesa, o superficie plana para ser realizado y un juego de tablero es todo aquel que necesita una superficie de juego delimitada, que forma parte del mismo donde transcurre el juego. En realidad, se utilizan como sinónimos, aunque son distintos, siendo el “de mesa” más amplio. Podemos entenderlo de una manera amplia como la unión en un conjunto, del juego reglado (ludus) y los elementos para realizarlo (juguetes)”.

Algunos idiomas tienen implícita esa diferenciación entre juegos de mesa frente a los otros juegos: “En inglés, un juego de mesa es un tabletop game y un juego de tablero es un boardgame, en francés el término jeux de societé engloba a todos los juegos de este tipo. En alemán el termino Brettspiel (juegos de tablero) engloba también a los Gesellschaftsspiel (juegos de sociedad), aunque normalmente se utiliza el término Spiel para este tipo de juegos. En portugués se les llama jogos de tabuleiro y en italiano Gioco da tavolo. La definición de Whitehill para juego de tablero es: un juego que utiliza una superficie ilustrada, llamada tablero, donde el juego se desarrolla"

Otras característica fundamental es el tablero. Los tableros son objeto de estudio por Catalán, para delimitar las generalizaciones que comparten todos ellos: “Utilizan una imagen o litografía, en un soporte impreso. El tablero pude estar doblado en varias partes. Normalmente se separa de la caja que lo contiene y se coloca sobre una superficie plana, aunque el tablero puede estar insertado en la propia caja o jugarse en la tapa o fondo de la caja contenedora. Normalmente está diseñado para ser jugado de 2 a 6 jugadores”.

* Este texto corresponde a una serie de lecturas y análisis del trabajo del año 2020 de Antonio Catalán Cultura y juegos de mesa analógicos: Los juegos de mesa modernos como fenómeno y artefacto cultural contemporáneo, para la UOC - Iván Fernández Frías